Es lamentable que muchas personas se estén tragando todo este engaño disfrazado de evangelio el cual nada mas se centra en los deseos carnales de los hombres, tales como exaltación al yo, desarrollo del autoestima, autosuficiencia,etc.
Esto es porque el hombre natural desea la admiración del resto de las personas, y la auto-promoción antes que renunciar a los tesoros de este mundo para seguir las pisadas de Cristo el cual dijo: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame.(Mat 16:24 ), Pero Satanás esta interesado en que nosotros no tomemos esa Cruz la cual es la Señal del padecimiento por causa de Cristo, haciéndonos creer que Dios no quiere que nosotros padezcamos, sin embargo el Apóstol Pedro escribió: al cual (Satanás) resistid firmes en la fe, sabiendo que los mismos padecimientos se van cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo. (1Pe 5:9).Es normal que el enemigo de nuestras almas no quiera que tomemos nuestra Cruz y nos neguemos a nosotros mismos pues de esta manera el detiene el trabajo que Dios esta haciendo en su iglesia, ya que el mundo está bajo el maligno su trabajo principal es contaminar la iglesia con este tipo de filosofías humanas y humanistas y para ello esta utilizando gente que representa autoridad dentro de la iglesia Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz. Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras.( 2Co 11:14-15).
Esto no es nada nuevo podemos observar que incluso a Cristo quiso persuadir para que pensara humanistamente cuando Pedro comenzó a reconvenirle que no fuera a la cruz pero Cristo le contesto: !!Quítate de delante de mí, Satanás!; me eres tropiezo, porque no pones la mira en las cosas de Dios, sino en las de los hombres. (Mat 16:23).Esa es la actitud que debemos de tener nosotros, reconocer que el Diablo quiere engañarnos como a Adán y Eva los cuales aunque no tenían naturaleza pecaminosa se vieron tentados a ser como Dios, a levantar la estima propia, a buscar la auto-gratificación, pero lo único que lograron fue caer en el pecado y quedar separados de Dios.
No nos engañemos
El hombre sin Dios no vale nada, y sin Cristo no puede llegar al Padre, la Biblia no nos manda a levantar nuestra auto-estima sino todo lo contrario digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener...(Rom 12:3) dejándonos en claro que nosotros también éramos en otro tiempo insensatos, rebeldes, extraviados, esclavos de concupiscencias y deleites diversos, viviendo en malicia y envidia, aborrecibles, y aborreciéndonos unos a otros. Pero cuando se manifestó la bondad de Dios nuestro Salvador, y su amor para con los hombres, nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo,
el cual derramó en nosotros abundantemente por Jesucristo nuestro Salvador, para que justificados por su gracia, viniésemos a ser herederos conforme a la esperanza de la vida eterna. (Tit 3:3-7).
Asi que el hombre no tiene ningún merito, ni capacidad, ni libertad, nació destituido de la gloria de Dios (Romanos 3:23)y solo en Cristo habiendo sido redimidos podemos tener nuestra esperanza ya Cristo lo dijo:
Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.( Juan 15:5)
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