miércoles, 17 de noviembre de 2010

Testigos de Jehová


Secta estadounidense. Desde su sede en Brooklin, Nueva York, y mediante la publicación de las revistas Atalaya y Despertad, los Testigos de Jehová se han extendido por todo el mundo. El origen de la secta se encuentra en las ideas de C.T. Russell que inició ese movimiento en la década de 1870. Esta secta se organizó, en 1884, con el nombre de Watch Tower Society [Sociedad del Atalaya]. Luego, en 1914, fundaron la Asociación Internacional de Estudiantes de la Biblia. Uno de sus primeros líderes fue J.F. Rutherford, quien reemplazaría a Russell en la dirección. A su vez Nathan Knorr dirigió el grupo a la muerte de Rutherford. En 1931, adoptaron definitivamente el nombre actual de Testigos de Jehová.
Los miembros o «proclamadores» deben dedicar gran parte de su tiempo a la «publicación» o «proclamación» de las buenas nuevas del Reino de Jehová.
Presentan algunas características del ® ARRIANISMO en su cristología. Jesús fue, según ellos, un hombre que murió para rescatar a los descendientes de Adán de la muerte física, y al resucitar fue exaltado por encima de los ángeles. Su creencia en el Espíritu Santo (aunque no son trinitarios), se limita a considerarle la «fuerza activa de Jehová». Anunciaron el fin del mundo para 1914, lo cual justifican con variadas interpretaciones. Esperan el fin del mundo en cualquier momento, aunque solo ciento cuarenta y cuatro mil «ungidos» irán al cielo. Los demás Testigos de Jehová (únicos en salvarse) habitarán la tierra nueva. No creen en la inmortalidad del alma, sino solo en la resurrección.
No prestan servicio militar, sino obediencia absoluta a la organización «teocrática», es decir, a la corporación religiosa a la que pertenecen. Consideran a la Iglesia Católica como la «gran ramera», y a los protestantes y evangélicos como los hijos de la misma. El mundo religioso, aparte de ellos, es «Babilonia la grande»

Fuente: Diccionario de Religiones

No hay comentarios: